Nadie puede negar la importancia de la manicura en el ámbito de la moda, el cultivo de la belleza y la salud. En la actualidad, la manicura, hecha en casa o en una estética, es un ritual cotidiano y necesario para muchas mujeres. De hecho, la demanda de estos servicios es tan grande que representa un importante sector de las trabajadoras autónomas. Casi no existen centros cosméticos, peluquería o spa que no cuente con un servicio de manicura.
¿Qué es la manicura?
La manicura es el proceso mediante el cual se asean y embellecen las manos de hombres y mujeres. Cuando nos hacemos una manicura, la especialista limpia y acicala nuestras palmas, dedos y uñas, eliminando el sucio y el tejido muerto de la piel. El segundo paso es el embellecimiento de las uñas. Para embellecer las uñas, la especialista puede hacer uso de varias técnicas y recursos.
Los inicios
El arreglo de uñas parece tener su origen en el Antiguo Egipto donde se encontró evidencia del uso de alheña para pintar las uñas. El color como el tamaño indicaban el estatus social al cual se pertenecía. Esta práctica también se desarrollo en China. Durante la dinastía Zhou se emplearon los metalizados en pintura, luego en la Dinastía Ming se impuso rojos oscuros y negro. Las diferentes pinturas se realizaban utilizando clara de huevo, cera de abejas, y goma arábiga.
En los primeros años del siglo XX, se mantenían los colores muy claros gracias a la nitrocelulosa con el que se realizaban los esmaltes en Estados Unidos. Durante este tiempo se inventaron instrumentos tan útiles como la lima de uñas, por Flowery Manicure Products en 1910; la cobertura protectora, por Anne Kindred en 1914; así como el palo de naranjo, por Dr Sitts. Con relación a los métodos de uso para realizar una manicura hermosa y perfecta, se detallan a continuación una serie de técnicas que han logrado un bum excepcional. Estas técnicas se emplean para brindar diversidad, calidad y belleza en tus uñas.
En la actualidad, las diferentes maneras de tratado, decoración, pintado y hasta incrustación en la uñas, así como sus accesorios, tienen cada vez más demanda en el mercado. Existen muchas maneras de lucirlas, colores, formas y materiales. Son consideradas una carta de presentación que representa la higiene y la personalidad para quien las usa.
Técnicas y sistemas más empleados en la actualidad
Uñas de gel
Este tipo de técnica da a las uñas un efecto muy natural. Son bastante flexibles y brillantes y menos resistente que las acrílicas. Se realiza empleando un gel directamente en la uña y secándolo con la lámpara Led. Se aplican entre 2 y 3 capas de gel, hasta que esté firme y resistente.
Tienden a permanecer intactas hasta 3 semanas, siempre y cuando se cuiden y se vayan retocando. Su duración es menor a las acrílicas. Además, pueden romperse con facilidad por lo que se aconseja no realizar movimientos bruscos.
Esmalte semipermanente
Esta técnica es ideal para aquellas personas con uñas medio largas o largas que desean un efecto regularmente duradero. Con ella las uñas quedan impecables, brillantes y sin marcas, ni estrías, desde la primera aplicación. La técnica es una mezcla entre esmalte y gel. Aporta mayor resistencia y un resultado de apariencia más natural. El acabado de la uña se logra aplicando un sellante que consigue acabados perfectos sin necesidad de retoques.
Uñas acrílicas o esculpidas
La técnica de uñas acrílicas o esculpida se realiza combinando polvo acrílico (polímero) con líquido acrílico (monómero). Esta técnica consiste en añadir unas extensiones a las uñas naturales para después decorarlas al gusto de cada quien, con cualquier esmalte o aplicación. El acrílico no debe emplearse en exceso porque debilita la uña natural. Este tratamiento es de larga duración pudiendo aguantar hasta 6 meses.
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